mataralgusano

Es todo un problema. Comunicar un proyecto artístico en un dossier en formato pdf con imágenes, una propuesta de acciones y un planteamiento conceptual en forma de algunos párrafos de palabras congruentes y un salpicón de filosofía en forma de referentes, a veces es más difícil de lo que aparenta. Y muchos artistas se habrán topado con aquella construcción de la realidad, formada por medio de la colección de archivos de sus trabajos en formato pdf. En estos planteamientos de proyectos radica la aprobación a una residencia artística o una beca las cuales financiarán y apoyarán su trabajo. Es un tiquete de avión al país del arte contemporáneo, con visa de la embajada del cOnTeMpOrAry ªªªªRtttttt** En estos planteamientos, ocasionalmente, se esconde una pregunta que muchas veces ya alberga su propia respuesta. Habrás aceptado a no poder sorprenderte de las muchas avenidas las cuales tu pregunta podrá enrrumbarte pero, por otro lado, es evidente que creerán en la claridad de tu proyecto. Una claridad otorgada por la luz benevolente del panteón de teóricos franceses cuya mención es la clave para la bóveda de tus deseos contemporáneos. La teoría en el dossier es muy pocas veces entretenida y en muchos casos el punto final el cual nunca se integró al proceso y sólo nos conlleva a un lugar oscuro que perpetua la mención gratuita de un corillo
intelectual. El artista conceptual estadounidense Félix González-Torres (1957-1996) les decía a sus estudiantes que si tenían problemas con la teoría habrían de “leerlo por tercera vez con un vaso de vino al lado y sacar algo de ésta, pero siempre pensar en la práctica” (ArtNews, 1995) Pienso que la recomendación de González-Torres se aplica al pensar en la manera que configuramos de esta teoría como un archivo muerto, muy similarmente a la manera en la cual concebimos el dossier. Este documento en formato pdf ha de referirse a un proceso en el cual se ha interiorizado la teoría y no es, por lo tanto, un homúnculo decorativo que cuelga de sí mismo. Es decir, visto de esta forma hasta se podría decir que el dossier nació muerto, con decoraciones teóricas, con diferentes proyectos concluidos y formulados como posibles en cierto límite de tiempo.

Pero el gusano no escoge, no ha de sentirse más o menos atraído a un documento concluido o un documento que plantee el proyecto como un proceso. Los gusanos se carcomen todo en espacios húmedos, se sienten atraídos a los adhesivos, gelatinas y almidones; es decir, materiales adicionales. Si pensamos en el salpicón de teoría en un dossier y el planteamiento finalizado como “materiales adicionales” tenemos la receta perfecta para atraer a los gusanos. Para alejar a los gusanos, habría que pensar en el dossier como un documento cuya forma y estructura es fluida y plantea preguntas que han de responderse de múltiples maneras, más no un archivo que se guarda en un folder en un disco duro, el cual solo mandaste alguna vez en un correo y se quedó el resto de la vida en tu bandeja de enviados. Aquí unas soluciones prácticas para hablar de tu archivo artístico: (CUIDADO: Esta lista también será carcomida por los gusanos, por lo que te motivo a que escribas tus propias instrucciones prácticas para matar los gusanos.)

1. Lista todos tus referentes, no solo aquellos con apellidos extranjeros. Si tus referentes incluyen la cercana inspección de videos de gusanos en YouTube o la compra compulsiva de golosinas con la apariencia de gusanos, por favor siéntete en la libertad de incluirlos.

2. Mata a tus vacas sagradas, todos aquellos teóricos, críticos, artistas y gurús quienes consideras sobre-humanos y no puedes dejar de pensarles de manera enaltecida. Admirar no es malo, pero sacralizar nos aleja de sus trabajos y no nos permite entenderlos.

3. Piensa en preguntas que no se responden a sí mismas, piensa en preguntas que genuinamente revelen tu curiosidad y más que todo que te den el espacio para sorprenderte de las respuestas.

4. Aléjate de toda la parafernalia lingüística que te enseñaron diferentes instituciones, úsala siempre y cuando venga de tu manera de expresarte y no le una estructura fija de expresión previamente determinada. Reinventamos el lenguaje diariamente, el dossier artístico es prueba de ello.

5. Si ves al gusano carcomiendo tus documentos, no lo mates. Intégralo a tu trabajo, piensa en el gusano: ¿por qué se sintió atraído a tu dossier? ¿Qué material adicional le atrajo? ¿Qué buscaba comer? A veces son simplemente restos de comida.